sábado, 21 de julio de 2012

exposición: un muro de historia

Imaginar un mundo sin color, volverlo narrativa y luego....imagen ...  aquí comparto un poco de esta vivencia
Este muro contiene todas las historias escritas, nuestros pinceles se untaron de tinta china para construir la experiencia. cada imagen es la evidencia de maestros creadores. 
en medio de ellas está la imagen de una mano, contacto con el mundo en tinieblas...entonces, yo narro que es posible percibir los colores...con el corazón!

Desde hace ya mucho tiempo que a él lo ha invadido la oscuridad, aquella que aún con los ojos abiertos no lo abandona y que según la opinión del resto del mundo, es la misma que desde niños no le ha permitido apoderarse de la verdadera belleza de las cosas;  asunto que a él poco le importa porque en cambio si lo ha descubierto a través del toque mágico de sus manos que todo se lo cuentan y del olor  de las cosas y seres que le rodean y que  le quedan impregnados en la memoria.

Como de costumbre, se instala cada tarde en aquella banca de parque, donde su vida transcurre tranquila, ya algunas canas se asoman en sus cienes  como contando cada una su historia de vida, una vida a oscuras y sin mayores tropezones, solo aquellos a los que se acostumbró para contar los pasos que lo llevan al encuentro con los sonidos conocidos de su momento de parque.

Siempre se había sentido tranquilo… hasta aquel día en que muy cerca a aquella banca de parque, pasa un taconeo que le roba el aliento y le deja aquel perfume que enciende las ganas del corazón y el por primera vez quiso despertar a sus ojos de las tinieblas, porque sus manos tímidas quedaron inmóviles ante la presencia de ese ser que se alejaba en ese taconeo que se movía al ritmo de su corazón, entonces dijo -“deseo”- y todo a su alrededor se reinventó en un instante..

El pájaro que trinaba en su oído, le habló del color azul del cielo, y sintió  la brisa suave que se coló en su piel;  la flor cercana que antes había acariciado, le dijo en su aroma de cierto color rosa en la suavidad de sus pétalos; un rayo de sol acaloro su frente y supo del amarillo que juguetea entre nubes.

De repente su mirada se llenó de una especie de resplandor, lo que había sentido su corazón  lo llenaba de emoción,  y sentía mas que nunca, así su alma se lleno de luz y como prisma pudo sentir un arcoíris por dentro. Y los colores que nunca había visto nunca brotaron de sus ojos como un pájaro, una flor, una brisa, un rayo de sol; mientras  su corazón galopante iba tras ella, con la esperanza de alcanzar aquel taconeo de parque que se alejaba.   Conoció que el color era emoción que penetraba en su oído, sus manos, su lengua y  que se atesora en el corazón. 

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